Centro Quiropráctica Girona Gran Via Jaume I, 42, 2, 2 Girona Catalunya, España 17001
+34649228889 1000€-2000€
Dolor de Espalda: Testimonio (5) Mi nombre es A.V. y tengo 29 años.
Ya a los 15 años y después de una temporada con fuertes dolores de espalda me diagnosticaron una hernia discal a la altura de las lumbares.
Toda mi vida desde que recuerdo he sufrido de la espalda por las razones más variadas, y muchas veces he tenido que quedarme en casa incapaz de andar del dolor: desde la regla hasta el hecho de estar de pie más tiempo del imprescindible (ir de compras, visitar un museo, etc.) me han provocado dolores terribles.
A los 25 años sufrí un fuerte ataque de ciática durante tres meses. Tras una nueva resonancia magnética y una electromiografía se determinó que mi pierna estaba perdiendo riego nervioso y me aconsejaron operarme de forma inmediata.
Después de la operación mis dolores de espalda mejoraron mucho, aunque siempre a costa de una cuidada higiene postural y de sesiones semanales de natación para fortalecer la musculatura de la espalda.
Siempre que me descuidaba en mis rutinas de cuidado volvía a sufrir fuertes dolores, aunque nunca fueron tan fuertes como antes de la operación.
Hasta hace algo menos de un año, cuando sufrí un nuevo ataque de ciática que me tuvo casi dos meses con fuertes dolores, y un mes más con una cojera incontrolable.
Harta de vivir con miedo y de medir mis actos en función de mi espalda, decidí buscar una solución a largo plazo. La medicina convencional sólo me ofrecía soluciones parciales como cirugía y analgésicos y sólo me aconsejaba estar bien quieta, no coger peso y cosas de ese estilo, absolutamente irrealizables para una persona de mi edad.
Un amigo me habló de la quiropráctica, de cómo le había mejorado tanto los dolores de espalda que padecía así como su estado de salud general.
Después de investigar un poco por mi cuenta, leí muchos testimonios de gente con problemas similares al mío y que habían mejorado muchísimo su calidad de vida, decidí iniciar el tratamiento con el Doctor Valdivia.
Apenas un mes después de comenzar el tratamiento empecé a notar cosas raras: en situaciones en las que anteriormente me hubiera dolido mucho la espalda, o hubiera tenido las piernas muy cargadas, ya no me dolía nada.
Semana tras semana, estos episodios de "ausencia de dolor" se multiplicaron, y muchos otros dolorcillos que yo pensaba que eran "normales" también fueron desapareciendo.
Desde que comencé el tratamiento he hecho una vida totalmente normal, he seguido buceando con botella, me he mudado de casa, con todo el esfuerzo que eso conlleva, incluso me he permitido el "lujo" de pegarme alguna carrera, cosa absolutamente impensable hace apenas 6 meses.
Mi calidad de vida ha mejorado muchísimo y ahora ya no tengo que pensar que puedo y que no puedo hacer por causa de mi espalda.
En definitiva mi experiencia con el tratamiento no ha podido ser más positiva, y no puedo si no recomendarlo encarecidamente a todas aquellas personas con dolores de espalda a las que la medicina convencional no ofrece más que parches temporales, sin buscar el verdadero origen del problema y con ello una solución a largo plazo.
A.V.
29 años.